¿Está lista la inteligencia artificial para reemplazar a los abogados?
Hace unos días leí la publicación de un colega preocupado por el impacto de la inteligencia artificial (IA) en nuestra profesión, refiriéndose en particular a ChatGPT. Si bien la IA ha avanzado significativamente en los últimos años, ¿realmente está lista para reemplazar a los abogados?
Así que decidí poner a prueba a la “competencia” y le hice una pregunta bastante sencilla; esto fue lo que sucedió.
Mi conversación con ChatGPT
Vladia Mucenic: ¿Qué sabes sobre el registro del #software como derecho de autor en México?
ChatGPT: En México, el registro del software como derecho de autor es un proceso mediante el cual se reconoce y protege la propiedad intelectual del software. El registro de software es otorgado por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) y proporciona al titular del derecho de autor ciertas ventajas legales (…)
Vladia Mucenic: Creo que te equivocaste, el software se registra ante el INDAUTOR.
ChatGPT: Lo siento, tienes razón, me equivoqué. El registro del software en México se realiza ante el Instituto Nacional del Derecho de Autor (INDAUTOR) y no ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) como mencioné anteriormente (…).
También probé con preguntas en materia fiscal y su información está incompleta, actualizada sólo hasta 2021 y no tiene acceso a tesis y jurisprudencias.
Honesto pero sobre todo muy atento.
Lo que más me asombró no fue que el robot estuviera equivocado, sino que aceptó y corrigió su error. Yo pensé que me iba a dar una excusa basada en sus limitaciones, pero en cambio, me ofreció una disculpa. Casi lo respeté por eso, pero no le confiaría porque falló en una tarea muy básica.
Si la inteligencia artificial estuviera a la altura de un abogado humano en términos de argumentación jurídica, estoy segura que DoNotPay no pagaría un millón de dólares para que un cliente se deje representar por el robot, sino sería al revés.
El robot tiene acceso a todo el conocimiento disponible en cuestión de microsegundos, pero persisten muchas dudas sobre su capacidad de razonar y de encontrar soluciones creativas. No es el conocimiento, sino el razonamiento, la calidad más importante de un abogado.
Si nos limitamos a acumular información, pronto seremos obsoletos. Si ejercemos nuestro razonamiento crítico y apostamos por la creatividad, tenemos buenas oportunidades de hacer frente a la competencia de la IA.
Dime, ¿qué opinas? ¿Contratarías a un abogado robot?
Si eres abogado, mejor dime si te dejarías operar por un médico robot.
¿Es mayor o menor el riesgo de usar la IA en vez del profesionista humano?
Visto en LinkedIn
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